Dentro del mantenimiento de extintores hay un paso muy importante que es la prueba hidrostática, cual se utiliza para los extintores que tengan cilindros o cartuchos de aluminio ya que han estado expuestos a temperaturas superiores a 177 º C. Esta prueba permite certificar el estado de efectividad de los extintores contra incendios, así como detectar una posible falla dentro del mismo.

Antes de realizar la prueba hidrostática, todo el contenido del extintor tiene que ser vaciado para evitar accidentes. Al momento de realizar estas evaluaciones se debe utilizar como medio de prueba agua u otro fluido compatible no comprensible. Por otro lado, debe tomarse en cuenta que no se debe de usar aire como medio de presión.

La prueba hidrostática consiste en: Una bomba de prueba hidrostática operada manualmente, capaz de producir menos de 150% de la presión de prueba; una conexión flexible para que se una la bomba de prueba y el cilindro; un traje protector para el personal que realice la prueba, que permita la observación del extintor y manguera mientras están bajo presión con la finalidad de detectar si hay alguna fuga u otros defectos.

Una vez verificado y realizado los pasos antes mencionados, los equipos son secados totalmente, a excepción del extintor de agua. La temperatura para secar estos quipos no debe de pasar de los 65º C dentro del cilindro; en caso el cilindro del extintor presente abolladuras o daño mecánico, inmediatamente debe ser separado para ser revisado y posteriormente ser incorporado nuevamente en el lugar que se encontraba.

Como se puede observar, es muy importante realizar el mantenimiento de extintores con la finalidad de asegurar que se encuentre en óptimas condiciones, permitiendo responder adecuadamente frente a una emergencia. Pónganse en contacto con nuestros especialistas, estaremos felices de atenderlos.